La espina bífida es una malformación congénita caracterizada por un defecto en el cierre de la columna vertebral. Este trastorno neurológico, que puede variar en gravedad, suele requerir atención médica especializada de por vida.
Puede provocar diversos problemas de salud, desde leves problemas sensoriales hasta parálisis más graves, dependiendo de la gravedad y la localización de la anomalía.
- Fetos y niños con defectos del cierre vertebral.
- Curación de la incisión.
- Infección.
- Hidrocefalia.
- Malformación de chiari.
- 97%
Las mejores clínicas con reseñas verificadas
- Gran Hospital fundado en 1999
- 200 camas
- 53.000 metros cuadrados
- Miembro de la Asociación Americana de Hospitales (AHA)
- Capacidad de 230 camas
- El mejor hospital de Ankara
- Nuevo hospital ultramoderno
- Hospital multiespecializado
- clase vip
Espina bífida: ¿cómo se forma?
La espina bífida es una malformación congénita caracterizada por un defecto en el cierre del tubo neural, la estructura primitiva del sistema nervioso. Este defecto, que suele producirse durante las primeras semanas de embarazo, provoca anomalías en la médula espinal y las vértebras.
Aunque se desconocen las causas exactas, se han identificado varios factores de riesgo, como la carencia de folato (vitamina B9),antecedentes familiares y factores potencialmente genéticos.
Tipos de espina bífida
La espina bífida se presenta en diversas formas, cada una de las cuales tiene características y consecuencias diferentes.
- Espina bífida oculta: es la forma más leve y frecuente. Se caracteriza por la presencia de una pequeña abertura en una de las vértebras, que generalmente no afecta a la médula espinal ni a los nervios. A menudo es asintomática y puede pasar desapercibida, de modo que se descubre por casualidad durante un examen de imagen.
- Espina bífida abierta: Esta forma es más grave e implica una abertura mayor en la columna vertebral que deja al descubierto parte de la médula espinal o las membranas circundantes. Puede provocar parálisis, problemas urinarios e intestinales y aumentar el riesgo de infección. El mielomeningocele y el meningocele son dos tipos de espina bífida abierta.
- Mielomeningocele: es la forma más grave de espina bífida abierta. Se caracteriza por una abertura en las vértebras a través de la cual la médula espinal y las membranas circundantes forman un saco prominente. Esta anomalía expone al niño a un alto riesgo de dificultades motoras, problemas de control de esfínteres y un mayor riesgo de infecciones potencialmente mortales.
- Meningocele: Menos frecuente, el meningocele es una forma de espina bífida abierta en la que solo sobresale una bolsa de líquido cefalorraquídeo a través de la abertura vertebral. Las consecuencias suelen ser menos graves que en el caso del mielomeningocele.
Factores de riesgo
La espina bífida es una malformación congénita compleja cuyo origen se debe a una combinación de factores que aún se desconocen en su totalidad. Sin embargo, la investigación ha identificado ciertos factores de riesgo.
- Factores genéticos y ambientales: los antecedentes familiares de defectos del tubo neural y el origen étnico (sobre todo caucásico e hispano) son factores predisponentes.
- Nutrición: una deficiencia de folato (vitamina B9) durante el embarazo es un factor de riesgo importante. Esta vitamina es esencial para el desarrollo del tubo neural.
- Medicación: La toma de determinados fármacos, como el ácido valproico, durante el embarazo puede aumentar el riesgo de espina bífida.
- Factores de salud maternos: la diabetes gestacional, la obesidad y una temperatura corporal elevada al principio del embarazo también se asocian a un mayor riesgo.
La prevención de la espina bífida pasa sobre todo por seguir una dieta rica en folatos y someterse a un riguroso seguimiento médico durante el embarazo.
Síntomas de la espina bífida
La espina bífida abierta se manifiesta de diversas formas, que varían en gravedad de un individuo a otro. En los casos menos graves, en los que los nervios raquídeos están intactos, no hay síntomas aparentes. Sin embargo, signos cutáneos como un mechón de pelo, un hoyuelo o una marca de nacimiento pueden indicar una anomalía subyacente de la médula espinal, que requiere pruebas de imagen médicas (resonancia magnética o ecografía) para su confirmación.
El mielomeningocele, una forma más grave, suele diagnosticarse antes o durante el nacimiento. Es esencial que el niño reciba atención médica especializada durante toda su vida. Las familias deben ser informadas sobre las posibles complicaciones asociadas a esta enfermedad.
En cambio, la espina bífida oculta no suele presentar síntomas ni complicaciones, por lo que basta con un seguimiento médico regular.
Tratamiento de la espina bífida en Turquía
La espina bífida es una malformación congénita compleja que requiere atención médica personalizada. En Turquía, los avances en neurocirugía pediátrica y rehabilitación ofrecen un tratamiento de vanguardia a personas con esta afección.
El tratamiento de la espina bífida varía en función de la gravedad de la malformación y de las complicaciones asociadas. Los principales enfoques terapéuticos son:
Cirugía prenatal y postnatal
Si se diagnostica durante el embarazo, puede recomendarse cirugía. Los tratamientos quirúrgicos incluyen:
- Cierre de la laguna meníngea: Este procedimiento quirúrgico, que a menudo se realiza en el útero o poco después del nacimiento, tiene por objeto proteger la médula espinal y los nervios.
- Hidrocefalia: puede ser necesaria una derivación ventricular para drenar el exceso de líquido cefalorraquídeo.
Rehabilitación funcional
Los tratamientos de rehabilitación funcional pueden recomendarse para ayudar a aliviar los síntomas de la espina bífida y mejorar la calidad de vida.
- Fisioterapia: se utilizan ejercicios específicos para fortalecer la musculatura, mejorar la movilidad y la coordinación.
- Urología y gastroenterología: El control regular es esencial para gestionar los problemas de micción y defecación.
Tratamientos complementarios
Dependiendo de los síntomas de la persona con espina bífida, pueden recomendarse otros tratamientos, como:
- Ortopedia: Pueden utilizarse órtesis para corregir deformidades y mejorar la postura.
- Medicación: El dolor, los espasmos musculares y otros síntomas pueden aliviarse con medicación.
- Logopedia o terapia del lenguaje para ayudar a controlar determinadas funciones.
El tratamiento de la espina bífida requiere un enfoque individualizado. Un profesional sanitario evaluará su caso particular y le sugerirá las opciones de tratamiento más adecuadas. No dude en ponerse en contacto con Turquie Santé para obtener información completa sobre las distintas opciones de tratamiento disponibles en Turquía.
Gracias a su red de especialistas de renombre, Turquie Santé puede ofrecerle un diagnóstico preciso y un tratamiento adaptado a su perfil. No espere más para comentar sus necesidades y explorar las soluciones terapéuticas más avanzadas.
Comparte esta página