Radioterapia en Turquía, Precios de Clínicas en Estambul 2025

Tipos de radioterapia

La radioterapia es un método versátil de lucha contra el cáncer. En muchos casos, puede utilizarse como tratamiento primario del cáncer, junto con la cirugía o la quimioterapia. En otros casos, se utiliza como tratamiento paliativo para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer avanzado. También puede utilizarse para tratar tumores recurrentes, metástasis o para reducir el tamaño de los tumores antes de la cirugía. 

Existen tres tipos de radioterapia:

• Radioterapia externa: un acelerador lineal de partículas produce rayos que penetran en la piel y atraviesan el tejido sano para atacar el tumor. Durante el tratamiento, un oncólogo radioterapeuta planifica cuidadosamente la dosis y los haces de radiación para minimizar el daño al tejido sano y, al mismo tiempo, tratar eficazmente las células cancerosas.
• Braquiterapia: consiste en colocar fuentes radiactivas dentro del cuerpo del paciente. Se trata de radioterapia interna, a muy poca distancia del tumor. Esto permite administrar una dosis elevada de radiación directamente a las células cancerosas minimizando la exposición de los tejidos circundantes.
• Radioterapia metabólica (interna-vectorizada): Se utiliza para tratar determinados tipos de cáncer de tiroides, la enfermedad de Vaquez, etc. y consiste en la administración oral de una sustancia radiactiva que se adhiere con precisión a las células cancerosas y las destruye.

Preparación para la radioterapia: pasos a seguir

Antes de iniciar el tratamiento de radioterapia en Turquía, el paciente se someterá a una consulta con el oncólogo radioterapeuta para discutir el plan de tratamiento. Durante esta consulta, el oncólogo evaluará diversos factores, como el tipo de cáncer, el tamaño y la localización del tumor y el estado general de salud del paciente.

En función de estos criterios, el oncólogo determinará la dosis de radiación adecuada y el programa de tratamiento más apropiado para el paciente.

La planificación del tratamiento del cáncer en Turquía también puede incluir exámenes avanzados de diagnóstico por imagen, como tomografías computarizadas o resonancias magnéticas. Estos exámenes permiten trazar con precisión la zona de tratamiento en tres dimensiones, proporcionando una base sólida para una intervención específica y eficaz.

¿Qué ocurre durante una sesión de radioterapia?

Durante una sesión de radioterapia, el paciente se coloca en una camilla en la sala de radioterapia. La sala donde se realiza el tratamiento está diseñada de acuerdo con las normas de seguridad para radiaciones ionizantes.

El terapeuta utilizará dispositivos de inmovilización para garantizar que el paciente permanezca inmóvil durante el tratamiento. A continuación, el radioterapeuta administrará la dosis de radiación prescrita utilizando una máquina que emite haces de radiación.

Aunque estará solo en la sala durante la sesión, permanecerá en contacto permanente con los terapeutas a través de un sistema de intercomunicación. Además, una cámara de vídeo le vigila constantemente. La sala permanece iluminada durante toda la sesión y, en caso necesario, el tratamiento puede interrumpirse inmediatamente.

Efectos secundarios de la radioterapia

Aunque indolora y eficaz en el tratamiento del cáncer, la radioterapia tiene algunos efectos secundarios.

Los efectos secundarios más frecuentes son:

• Fatiga: se trata de un efecto secundario muy común que desaparece en cuanto finaliza la radioterapia.
• Problemas cutáneos: los rayos penetran en la piel para llegar a las células infectadas, por lo que la piel puede enrojecerse, secarse o picar, con un cambio notable de color.
• Caída del cabello: se trata de una caída local temporal que afecta únicamente a la zona tratada (el cabello reaparecerá en cuanto finalice el tratamiento).
• Disminución de las células sanguíneas: puede ser frecuente si la radioterapia va acompañada de quimioterapia.
• Náuseas y problemas intestinales o de vejiga.

Seguimiento tras la radioterapia: protocolos y medidas de control

El equipo de radioterapeutas de Turquía supervisa la evolución y el bienestar del paciente tras el tratamiento de radioterapia. En muchos casos, ajustan la dosis o la duración de la radioterapia en función de las necesidades de cada paciente.

Tras completar la radioterapia, los pacientes suelen tener citas periódicas de seguimiento con su oncólogo radioterapeuta para evaluar la eficacia del tratamiento y vigilar cualquier posible complicación.

Durante estas visitas, pueden realizar un examen físico, análisis de sangre o pruebas de imagen en diferentes momentos del tratamiento para evaluar la respuesta del tumor a la radioterapia.

Su recuperación durante y después de la radioterapia depende del tipo de cáncer, el estadio del cáncer, la dosis de radiación y su estado general de salud. Algunas personas pueden seguir trabajando y disfrutando de sus actividades de ocio habituales durante la radioterapia. Otras se cansan con facilidad y necesitan más descanso.

Además de vigilar la recidiva, el seguimiento tras la radioterapia también puede incluir el tratamiento de los efectos secundarios o síntomas persistentes que puedan aparecer.

Tras un tratamiento de radioterapia, los pacientes pueden ser remitidos a otros tratamientos complementarios. Por ejemplo, algunos pacientes pueden necesitar inmunoterapia o quimioterapia para atacar las células cancerosas con mayor precisión y reducir el riesgo de recidiva.