Cirugía de Hallux valgus en Turquía: Precio, recuperación y tasa de éxito 2025

¿Por qué se desarrolla el hallux valgus?

Varios factores contribuyen al desarrollo de esta protuberancia ósea:

• Factores hereditarios: El hallux valgus suele ser hereditario. Si varios miembros de su familia lo padecen, es más probable que usted desarrolle esta deformidad.
• Calzado inadecuado: El uso de zapatos demasiado apretados, puntiagudos o de tacón alto ejerce una presión excesiva sobre la parte delantera del pie, lo que puede provocar hallux valgus.
• Morfología del pie: Los pies planos o una estructura particular de los huesos del pie pueden predisponer a esta deformidad.
• Edad y hormonas: Con la edad, los ligamentos y tejidos del pie se debilitan, aumentando el riesgo de hallux valgus. Las mujeres se ven más afectadas debido a factores hormonales que hacen que sus ligamentos sean más flexibles.

Consecuencias del hallux valgus

Más que un problema estético, el hallux valgus puede afectar gravemente a su comodidad y movilidad. Esta deformidad del dedo gordo provoca un dolor persistente, sobre todo al caminar o llevar zapatos. A medida que el bultito óseo crece, se enrojece, se inflama y se vuelve extremadamente sensible, dificultando cada paso.

Con el tiempo, el pie agrandado dificulta aún más la elección del calzado adecuado. La fricción aumenta la incomodidad y encontrar un par de zapatos adecuados se convierte en todo un reto. Esto limita su estilo de vida, obligándole a elegir zapatos anchos y, a veces, antiestéticos.

El hallux valgus no solo afecta al pie, sino que también modifica la postura y la forma de andar. Esta inestabilidad puede provocar dolores secundarios en rodillas, caderas y espalda, que agravan aún más las molestias.

Si no se trata, la situación empeora. El dolor se hace más intenso, la deformidad más pronunciada y la movilidad se resiente. No permita que el hallux valgus controle su vida diaria. Consulte ahora a un especialista para descubrir las mejores soluciones y recuperar su comodidad.

¿Cuándo debo plantearme la cirugía?

Si presenta los primeros signos de hallux valgus (una protuberancia ósea, dolor o enrojecimiento),acuda a un podólogo o especialista. Existen soluciones, como el uso de plantillas ortopédicas o ejercicios de reeducación, y en casos graves, la cirugía.

La cirugía solo se recomienda si el hallux valgus se agrava y causa dolor agudo y molestias diarias. En pacientes jóvenes, la cirugía solo debe plantearse cuando hayan terminado de crecer, es decir, alrededor de los 16 años.

Técnicas de cirugía del hallux valgus

La cirugía del hallux valgus puede realizarse mediante diversas técnicas, adaptadas a la gravedad de la deformidad y a las necesidades de cada paciente. En la actualidad, se prefiere la cirugía mínimamente invasiva, ya que permite una corrección eficaz con incisiones mínimas, lo que reduce el dolor postoperatorio y el tiempo de recuperación.

Cirugía percutánea mínimamente invasiva

Esta moderna técnica, que se realiza bajo anestesia local y en régimen ambulatorio, permite corregir la deformidad sin abrir la articulación. El cirujano realiza la corrección a través de pequeñas incisiones de 2 a 5 mm, utilizando instrumentos ultrafinos. Un fluoroscopio, un aparato de rayos X de precisión, ayuda al cirujano a visualizar la operación en tiempo real.

Este método ligero y mínimamente traumático es ideal para tratar el hallux valgus moderado. En los casos más graves, pueden introducirse pequeños tornillos por vía percutánea para estabilizar la corrección. Al no ser necesario realizar grandes incisiones, las cicatrices son mucho menos visibles y se recupera antes.

Cirugía abierta

Aunque hoy en día se utiliza menos, la cirugía abierta sigue siendo una opción eficaz para las deformidades graves del hallux valgus. Esta técnica consiste en realizar una incisión para acceder directamente a la articulación. A continuación, el cirujano realiza una osteotomía (resección del hueso sobresaliente) y recoloca el hueso mediante tornillos o placas para garantizar una corrección duradera.

Aunque este método ofrece resultados sólidos, está siendo sustituido gradualmente por técnicas mínimamente invasivas, que son menos invasivas y más cómodas para el paciente.

Complicaciones postoperatorias

Como todas las intervenciones quirúrgicas, la cirugía del hallux valgus conlleva ciertos riesgos. Aunque la mayoría de los pacientes se recuperan sin problemas, pueden surgir complicaciones que requieren un tratamiento específico. Entre ellas se incluyen:

• Infecciones: En raras ocasiones, puede desarrollarse una infección alrededor de los tornillos o clavos utilizados para estabilizar el hueso. Por lo general, un seguimiento cuidadoso y unos cuidados adecuados pueden evitarlo.
• Mala cicatrización ósea: si el hueso no se recoloca perfectamente, pueden aparecer molestias persistentes que, en algunos casos, hacen necesaria una nueva intervención quirúrgica.
• Artrosis: con el tiempo, algunos pacientes desarrollan artrosis, sobre todo si la deformidad era grave antes de la operación.
• Problemas de hormigueo o sensibilidad: la irritación de los nervios durante la operación puede provocar hormigueo o una pérdida temporal de sensibilidad en el pie.
• Problemas de cicatrización: Los problemas de circulación sanguínea pueden ralentizar la cicatrización y hacer que las cicatrices sean más visibles de lo esperado.

Recuperación de la cirugía de hallux valgus

La recuperación de la cirugía de hallux valgus suele durar entre 30 y 40 días, dependiendo de la técnica utilizada. La cirugía percutánea mínimamente invasiva suele ser más rápida, con menos dolor y un retorno más temprano a la actividad. Durante los primeros días, es fundamental mantener el pie elevado para limitar la hinchazón y favorecer una buena cicatrización.

En general, se puede caminar sin muletas desde el principio, pero debe limitarse a periodos cortos para evitar una presión excesiva sobre la articulación en proceso de curación. Tampoco se recomienda permanecer de pie durante mucho tiempo para reducir el riesgo de inflamación.

Entre tres y seis semanas después de la operación, pueden iniciarse sesiones de reeducación con un fisioterapeuta para mejorar la movilidad del pie y evitar la aparición de rigidez articular. Se programa una consulta postoperatoria al cabo de dos o tres semanas para comprobar la cicatrización, retirar los puntos y cambiar el vendaje si es necesario. Durante este tiempo, es fundamental utilizar calzado médico especializado para proteger el pie y garantizar una cicatrización óptima.

Con Turquie Santé, tendrá un seguimiento personalizado y contará con todo el apoyo médico que necesita para una recuperación sin preocupaciones.

¿Cuál es la tasa de éxito de la cirugía del hallux valgus?

La cirugía de este trastorno tiene una tasa de éxito superior al 90 %, y la mayoría de los pacientes están satisfechos con los resultados. Sin embargo, para maximizar las posibilidades de éxito, es esencial elegir un cirujano con experiencia y seguir cuidadosamente las recomendaciones posoperatorias.

Contrariamente a la creencia popular, la gravedad de la deformidad no afecta directamente a la tasa de éxito, pero sí influye en la complejidad de la intervención. Cuanto más pronunciado sea el juanete, mayor será la corrección quirúrgica necesaria. Por lo tanto, la pericia del cirujano es fundamental para garantizar un resultado final de calidad, tanto funcional como estético.

Gracias a Turquie Santé, tendrá acceso a los mejores especialistas en cirugía ortopédica y se beneficiará de una atención médica personalizada para gestionar su hallux valgus de manera óptima.