La escoliosis es una afección médica que consiste en una desviación lateral permanente de la columna vertebral, a menudo acompañada de rotación y deformación de cada una de las vértebras.
Puede ser congénita o desarrollarse en etapas posteriores de la vida. La curvatura anormal de la columna vertebral no se corrige espontáneamente y puede empeorar con el tiempo. En casos graves, puede ser necesaria la cirugía para evitar complicaciones y mejorar la calidad de vida del paciente.
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Cirugía de la escoliosis en Turquía: precios y mejores clínicas
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No obstante, los costes pueden variar en función del nivel de atención que requiera el paciente. No obstante, en comparación con otros países, la cirugía de escoliosis en Turquía es más asequible.
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Causas de la escoliosis
La escoliosis, también denominada deformidad escoliótica de la columna vertebral, puede ser de dos tipos:
- Congénita, es decir, presente desde el nacimiento por causas hereditarias.
- Adquirida, es decir, vinculada a patologías de la cadera, de los miembros inferiores o de la propia columna vertebral.
Las mujeres son siete veces más propensas a padecerla que los hombres y tienen más riesgo de desarrollar formas más graves de escoliosis.
En algunos casos, la escoliosis puede estar asociada a trastornos del colágeno, neuromusculares o endocrinos.
Por otra parte, la escoliosis adquirida se produce como resultado de lesiones traumáticas o inflamatorias de la columna vertebral, o puede estar causada por lesiones neuromusculares o degenerativas adquiridas.
Sin embargo, en la mayoría de los casos el origen es desconocido, por lo que se configura el cuadro clínico de la escoliosis idiopática.
Otras causas de escoliosis son la parálisis cerebral, la espina bífida, la distrofia muscular, la atrofia muscular espinal y los tumores.
Síntomas de la escoliosis
La escoliosis es una malformación de la columna vertebral que se caracteriza por una curvatura anormal de la misma. Esta curvatura puede variar de una persona a otra y agravarse con el tiempo.
Presta atención a los siguientes síntomas, que pueden indicar la presencia de escoliosis:
Signos | Características |
Asimetría del cuerpo |
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Deformidades de la espalda |
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Otros signos |
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Si observa uno o varios de estos signos, sobre todo en niños y adolescentes que aún están creciendo, debe consultar a un médico. Un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado pueden ayudar a limitar la progresión de la escoliosis y sus complicaciones.
Diagnóstico de la escoliosis (leve o grave)
El diagnóstico de la escoliosis se basa en un examen físico y en pruebas médicas de imagen.
Exploración física
El médico examinará la columna vertebral para detectar curvaturas anormales y otros signos de escoliosis.
Pruebas de imagen
Las radiografías son el método más habitual para diagnosticar la escoliosis. Si es necesario, el cirujano ortopédico puede utilizar una tomografía computarizada (TC) o una resonancia magnética (RM) para obtener imágenes más detalladas de la columna vertebral.
Medición de la gravedad de la escoliosis
La gravedad de la escoliosis se mide generalmente por el ángulo de curvatura de la columna vertebral:
- Curvatura leve: Menos de 25-30 grados.
- Curvatura moderada: Entre 25-30 y 45-50 grados.
- Curvatura grave: Más de 45-50 grados.
El tratamiento de la escoliosis depende de la gravedad de la curvatura, la edad del paciente y otros factores.
Recuerde que esta información no sustituye al asesoramiento médico profesional. Si sospecha que puede tener escoliosis, puede consultar a uno de nuestros médicos asociados para que le hagan un diagnóstico y le prescriban un tratamiento adecuado.
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Tratamiento de la escoliosis: ¿en qué consiste?
En Turquía, el tratamiento se adapta a cada paciente y tiene en cuenta varios factores, como la gravedad de la curvatura, la edad y el estado de salud general.
Enfoques no quirúrgicos
Para las curvaturas de leves a moderadas, puede prescribirse un corsé ortopédico a medida como tratamiento no quirúrgico. El objetivo es ralentizar el empeoramiento de la deformidad y mantener la curvatura dentro de unos límites.
Enfoques quirúrgicos
En casos graves o cuando el corsé no es suficiente, puede considerarse la cirugía. El objetivo de la cirugía es corregir la curvatura de la columna, detener su progresión y mejorar la función respiratoria. La técnica quirúrgica más adecuada se elige en función de la gravedad de la escoliosis.
Seguimiento y observación
Para las curvaturas leves que no suponen un riesgo de empeoramiento significativo, puede bastar con un seguimiento periódico por parte de un médico especialista. De este modo, es posible hacer un seguimiento de la evolución de la escoliosis y tomar medidas si es necesario.
Cirugía de escoliosis en Turquía
La cirugía puede ser un salvavidas para las curvaturas graves (más de 45 grados). Dada la ineficacia de los corsés en estos casos, la cirugía tiene dos objetivos principales:
- Detener el deterioro de la curvatura.
- Corregir la deformidad de la columna vertebral.
Sin embargo, esta operación no debe tomarse a la ligera. Existen efectos secundarios y riesgos, por lo que es fundamental proporcionar a los pacientes información clara y completa para que puedan tomar una decisión con conocimiento de causa.
La artrodesis es una intervención muy delicada que dura unas cuatro horas. Se realiza bajo anestesia general en la espalda del paciente y consiste en fijar dos barras de titanio a la columna vertebral para enderezarla.
Durante la intervención, se vigila atentamente el funcionamiento de la médula espinal para detectar posibles problemas mediante potenciales evocados (pruebas que miden la respuesta del sistema nervioso central a estímulos sensoriales).
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