El sobrepeso y la obesidad son problemas de salud derivados del exceso de grasa corporal que pueden provocar diversas complicaciones y aumentar el riesgo de padecer enfermedades crónicas. Un tratamiento eficaz se basa en una dieta equilibrada, la práctica regular de actividad física y una supervisión médica adecuada. En algunos casos, pueden considerarse soluciones complementarias en Turquía, como la colocación de un balón gástrico, siempre bajo la supervisión de un profesional sanitario.
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El coste medio de una operación de balón gástrico en Turquía ronda los 1500 euros, un precio especialmente atractivo para un servicio de alta calidad. En el caso de los balones gástricos ingeribles, el precio puede variar en función del tratamiento concreto.
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Balón gástrico en Turquía
El balón gástrico es una solución innovadora y no quirúrgica para tratar la obesidad. La técnica consiste en insertar endoscópicamente un dispositivo médico esférico de silicona en el estómago del paciente.
Una vez colocado, el balón se llena con una solución salina estéril o aire, lo que le permite ocupar parte de la cavidad gástrica. Esta técnica reduce la capacidad del estómago y favorece una sensación temprana de saciedad al comer, lo que ayuda a los pacientes a reducir su ingesta calórica y a perder peso de forma significativa y sostenible.
El balón gástrico está diseñado para ser temporal, con un periodo de colocación que oscila entre los 6 y los 12 meses. Al finalizar este periodo, se retira mediante un procedimiento endoscópico sencillo realizado por profesionales cualificados.
Este enfoque médico, combinado con un apoyo nutricional y psicológico personalizado, ofrece una solución eficaz para los pacientes que desean recuperar un peso saludable sin necesidad de recurrir a la cirugía.
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¿Cuándo se recomienda el balón gástrico?
El balón gástrico está especialmente indicado para personas con sobrepeso u obesidad moderada, con un IMC (índice de masa corporal) de entre 25 y 35. Representa una alternativa eficaz para pacientes que no han conseguido perder peso mediante dieta y actividad física regulares, sin necesidad de recurrir a una cirugía invasiva.
La inserción del balón dura solo 20 minutos y es un método rápido y sencillo para lograr una pérdida de peso significativa. Sin embargo, es fundamental consultar previamente a un cirujano bariátrico o a un gastroenterólogo para evaluar la viabilidad y los beneficios del dispositivo para cada caso particular.
Para optimizar los resultados y garantizar una pérdida de peso duradera, los pacientes deben comprometerse a seguir un tratamiento completo. Esto incluye recibir apoyo nutricional de manera regular y realizar modificaciones en el estilo de vida.

Contraindicaciones del procedimiento
El balón gástrico no está recomendado en los siguientes casos:
- Cirugía gástrica previa.
- Trastornos alimentarios no controlados (como la bulimia).
- Enfermedades erosivas activas del estómago o del esófago.
- Embarazo o lactancia.
- Pacientes que padezcan la enfermedad de Crohn, debido al mayor riesgo de obstrucción intestinal.
- Pacientes con hernia de hiato grave.
- Enfermedad hepática grave.

Tipos de balones intragástricos
Los balones gástricos varían en función de su método de aplicación, composición y duración del tratamiento. A continuación se presenta un resumen de las principales opciones disponibles para favorecer la pérdida de peso:
Tipos de balón gástrico | Características |
Allurion (antes Elipse) | Fabricado en poliuretano, Allurion (anteriormente conocido como Elipse) no requiere cirugía, endoscopia ni anestesia. El balón se ingiere en forma de cápsula y se rellena con una solución salina a través de un fino catéter. El procedimiento, que dura unos 20 minutos, permite que el balón se llene con 550 ml de agua y se disuelva de forma natural al cabo de cuatro meses. Este dispositivo ofrece una pérdida de peso media del 10-15 % y un seguimiento personalizado por parte de un equipo especializado. |
Orbera 365 | Este balón, que se inserta por endoscopia y se rellena con entre 400 y 700 ml de suero fisiológico, tiene una duración de seis meses. Diseñado para pacientes con un IMC de entre 30 y 40, Orbera 365 puede reducir el peso en un 12 %. El balón se introduce y se extrae bajo sedación leve. Durante el periodo de adaptación, este tratamiento puede provocar náuseas y dolor. |
Heliosphere | El globo Heliosphere Bag, ligero y lleno de aire, está diseñado para pacientes con un IMC de entre 27 y 35 y se coloca durante seis meses. Su objetivo es cambiar los hábitos alimentarios y reducir las porciones de comida. Gracias a su bajo peso, provoca pocas náuseas o vómitos. |
Spatz3 | El balón Spatz3 es adecuado para periodos de tratamiento más largos (hasta 12 meses). Su volumen se puede ajustar según las necesidades del paciente. Este balón consigue una pérdida de peso media del 14 % después de 6 meses y es especialmente útil para pacientes con un IMC entre 30 y 40. |
MedSil | Fabricado con silicona de calidad médica, el balón MedSil está diseñado para pacientes con un IMC de entre 27 y 35. Se rellena con solución salina y puede contener entre 400 y 700 ml. El balón favorece la saciedad precoz y permanece en su sitio durante seis meses. |
Obalon | El sistema Obalon destaca por su método no invasivo. No se requiere anestesia, ya que el balón se ingiere en forma de cápsula. Se pueden insertar hasta tres balones cada quince días. Este sistema ayuda a reducir el consumo de alimentos, lo que facilita la pérdida de peso. El procedimiento es rápido y los efectos secundarios suelen ser moderados. |

Seguimiento postoperatorio
Tras la inserción del balón gástrico, es necesario pasar una noche en el hospital bajo supervisión médica para garantizar una recuperación segura. Durante este tiempo, es fundamental realizar un seguimiento médico riguroso y un control nutricional, especialmente en las primeras fases de la recuperación. Se realizarán radiografías para comprobar que el balón está correctamente colocado y funcionando correctamente durante todo el proceso.
Para obtener los mejores resultados, los pacientes deben seguir una dieta equilibrada después de la operación. En las primeras semanas, la dieta debe consistir principalmente en líquidos y, posteriormente, en semilíquidos, hasta volver gradualmente a una dieta normal tras la cuarta semana. Esta transición es esencial para garantizar la buena tolerancia del balón y prevenir cualquier complicación digestiva. Un dietista del hospital de Turquía le ayudará a adaptar sus comidas para que la transición a una dieta sólida sea suave y controlada.
Al día siguiente de la operación, algunos pacientes pueden experimentar náuseas leves, pero estos síntomas suelen ser temporales y no impiden volver rápidamente a una dieta más variada.
Los balones gástricos están diseñados para permanecer en su sitio entre 6 y 12 meses. Es importante respetar este periodo para evitar complicaciones a largo plazo y maximizar los beneficios de la intervención.
Resultados del balón gástrico
Su uso, combinado con un cambio en la dieta y la realización de actividad física regular, suele producir una pérdida de peso significativa. Por término medio, los pacientes pierden entre un 10 % y un 15 % de su peso corporal total, lo que puede representar una pérdida de entre 10 y 15 kilos en cuatro meses.
Sin embargo, los resultados varían en función de factores como el estilo de vida, el compromiso con un programa de control de peso, los hábitos alimentarios y la práctica de ejercicio físico. Además de la pérdida de peso, el balón gástrico pretende ayudar a los pacientes a adoptar nuevos hábitos alimentarios, a controlar las porciones y a cambiar su relación con la comida. De este modo, el balón gástrico sirve como herramienta de apoyo para facilitar cambios en el estilo de vida a largo plazo.
Posibles efectos secundarios
El balón gástrico puede ir acompañado de ciertos efectos secundarios, que suelen ser temporales y aparecer en los días siguientes a la intervención. Los más frecuentes son náuseas, vómitos, dolor abdominal y sensación de pirosis (ardor de estómago). En raras ocasiones, puede producirse deshidratación y será necesario extraer prematuramente el balón. El desinflado del balón es excepcional si se respeta el tiempo de inserción recomendado.
Se recomiendan tratamientos adecuados para controlar estos efectos secundarios:
- Quemaduras epigástricas y retroesternales: uso de agentes antisecretores y apósitos gástricos.
- Dolor abdominal: prescripción de antiespasmódicos y analgésicos.
- Vómitos y náuseas: administración de procinéticos u ondansetrón.
Un seguimiento riguroso es esencial: se debe contactar con el paciente y/o verle en consulta en los días siguientes a la inserción. Si los síntomas persisten, puede considerarse la hospitalización para garantizar una atención óptima.
El equipo médico de Turquie Santé se compromete a acompañar a cada paciente durante todo el proceso de recuperación. Garantizamos un seguimiento personalizado y soluciones adaptadas para minimizar las molestias y maximizar los resultados.
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La inserción de un balón gástrico es un procedimiento no quirúrgico que ofrece una solución temporal a la obesidad. Es un balón de poliuretano real o de silicona flexible, y está relleno de suero fisiológico. El balón se introduce en el estómago del paciente para darle a éste una sensación de saciedad.
Este procedimiento está contraindicado para:
- Personas que hayan padecido lesiones gástricas (apendicitis, úlcera, etc.);
- Menores de edad;
- Pacientes con trastornos mentales;
- Personas en tratamiento con anticoagulantes o antiinflamatorios;
- Mujeres embarazadas ;
- Personas con enfermedades hepáticas graves.
El embarazo está contraindicado en este caso. En el caso de las mujeres, se prescribirán anticonceptivos tras la inserción del balón gástrico.
La tasa de éxito de la inserción del balón gástrico en Turquía es del 80%.
El balón gástrico puede provocar efectos secundarios como: dolor abdominal, vómitos y también es posible la gastritis.